El Plan de los 1.000 Días establece una nueva asignación
por Cuidado de Salud Integral, que consiste en el pago de una Asignación
Universal por Hijo a concretarse una vez por año para ayudar al cuidado de cada
niño o niña menor de tres años. Asimismo, extiende la Asignación Universal por
Embarazo (AUE), que pasará de tener seis mensualidades a nueve, para abarcar la
totalidad de la gestación. También se amplía el pago por Nacimiento y por
Adopción a las personas beneficiarias de la Asignación Universal por Hijo
(AUH), que hasta ahora están excluidas de este beneficio.
Por otro lado, se prevé la provisión pública y gratuita de
insumos esenciales durante el embarazo y para la primera infancia, coordinando
y ampliando los programas existentes, y la creación del Sistema de Alerta
Temprana de Nacimientos y el Certificado de Hechos Vitales con el objeto de
garantizar el derecho a la identidad de las niñas y niños recién nacidos. Entre
los insumos, se menciona la provisión de medicamentos esenciales, vacunas,
leche, alimentos para el crecimiento y desarrollo saludable en el embarazo y la
niñez.
La normativa busca afianzar el “derecho a la protección en
situaciones específicas de vulnerabilidad” para las “niñas y las niñas con
necesidad de cuidados especiales en sus primeros años”, “personas que cursen
embarazos de alto riesgo” o padezcan “trombofilia”, “mujeres u otras personas
gestantes en situación de violencia por razones de género” y “niñas y
adolescentes embarazadas”.
También se crea en el ámbito del Ministerio de Salud una
Unidad de Coordinación Administrativa “para la atención y el cuidado integral
de la salud de las mujeres y personas gestantes durante el embarazo y de sus
hijos hasta los 3 años”.