BTR
Consulting, compañía de alcance global especializada en consultoría en
ciberseguridad, administración de riesgos, negocios y auditoría, en el marco
del mes de las infancias realizó un análisis sobre “Darkness digital”, basado
en las principales amenazas del mundo online para niños y adolescentes; así
como las plataformas y aplicaciones que usan día a día. Entre los resultados
más alarmantes, se destaca que el 60% de los usuarios han sido testigos del
acoso online, pero la mayoría no interviene, y, a su vez el 80% de los jóvenes
cree que las plataformas de redes sociales deben hacer más para abordar el
ciberacoso.
Gabriel
Zurdo, CEO de la firma, declara: “Las víctimas no están en la escuela, estas
permanecen hiperconectadas, los agresores esconden su identidad y se cuentan
por millones, las plataformas relajaron los controles y además en muchos casos
el abusador es un miembro de la misma familia”.
Cuáles son
los principales peligros:
Proliferaron
los “hashtags” y sugerencias con palabras específicas aparentemente inocentes.
Sin embargo, una simple búsqueda con estas palabras en Google expone imágenes
de desnudez de personas mayores y adultos manteniendo relaciones sexuales.
OMEGLE CHAT
es una de las plataformas más notorias en la categoría de aplicaciones de
amistad online. La mayor virtud radica
en la libertad absoluta para mantener el anonimato, construir identidad o
suplantarla
La mayoría
de las veces, los gamers acceden a videos de YouTube (tutoriales) con enlaces
en la descripción, apuntando a archivos que instalan malware en sus
dispositivos.
CYBERBULLYING
tanto en los espacios online como en los offline. Las tecnologías ofrecen una
amplia variedad de canales para realizar el acoso, como pueden ser mensajes,
memes o stickers.
GROOMING, es
la acción de un adulto de acosar a un menor mediante el uso de recursos
digitales, comunicaciones electrónicas, redes sociales, WhatsApp, entre otras.
Desde BTR
indican que los distribuidores de imágenes de abuso sexual infantil
intercambian enlaces en YouTube, Facebook, X, Instagram, WhatsApp utilizando un
lenguaje “codificado” para evadir las herramientas de detección
La escala
completa de la explotación comercial de contenidos e imágenes domésticas
inapropiadas con participación de menores es difícil de conocer. Los sitios a
menudo se disfrazan para que parezcan legales, o se ocultan en la Deep y
darkweb, lo que permite a las personas actuar de forma anónima.
“Es
importante entender que el mundo digital atraviesa la vida de los niños y niñas
y ser conscientes que existen riesgos. Por eso, para comenzar a hablar de
prevención, lo primordial es la construcción del diálogo en un marco familiar
respecto a estos temas”, concluye Zurdo.
¿Cómo
prevenir y proteger a los más chicos?
Las familias
deben participar de manera proactiva en las actividades online y off-line de
sus hijos y pueden hacerlo hablando con ellos sobre la seguridad del mundo
digital y real, que incluye:
Participar
en debates sobre por qué deben tener cuidado al hacer nuevos amigos y por qué
nunca deben compartir sus fotos o videos personales con otras personas.
Usar
aplicaciones de monitoreo remoto en sus teléfonos celulares y computadoras.
Establecer
rutinas y permitir un tiempo en el que los niños puedan navegar por Internet o
usar redes sociales.
Hacer uso de
la opción perfil privado en redes sociales.
No aceptar
en redes sociales a personas desconocidas
Antes de
subir una foto en redes sociales, pensar que esa imagen puede verla cualquier
persona y para siempre.
Utilizar
contraseñas complejas y renovarlas periódicamente.
Rechazar los
mensajes de tipo sexual o pornográfico.